Comunicación: ¿HAS ESTADO EN MARTIAN? (coaching, counselling) - Coaching Azul
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Comunicación: ¿HAS ESTADO EN MARTIAN? (coaching, counselling)

Comunicación: ¿HAS ESTADO EN MARTIAN? (coaching, counselling)

23:09 05 noviembre in blog, coaching, comunicación
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<< El enfoque transformacional del conflicto trata del nosotros: ¿Cómo podemos crear juntos algo asombroso>>

S.R. Covey

 

Este post lleva varios días escrito, pero no acababa de rematarlo. Me he inspirado en la película que fui a ver con mi hermana Aurora el pasado 18 de Octubre.

 

Martian no es un lugar creado por mí o de mi propiedad aunque pudiera parecerlo.

THE MARTIAN es el título de la película dirigida por el genial Ridley Scot y protagonizada por Matt Damon que ahora se está proyectando en los cines españoles y que me ha servido de inspiración para crear este post y transmitiros lo que yo he sentido al ver este brillante film.

Resumidamente The Martian trata sobre una misión de la NASA cuyo destino es Marte. La tripulación está compuesta por dos mujeres y cuatro hombres. Una vez allí y tras una feroz tormenta, uno de ellos, Mark Watney, interpretado por el citado Matt Damon y protagonista principal de la historia, sufre un accidente y queda solo en ese planeta. Sus compañeros realizan un despegue de emergencia y  le dejan creyendo que está muerto, cuando en realidad no lo está.

A partir de ese abandono, nos encontramos ante una aventura de SUPERACION PERSONAL y TRABAJO EN EQUIPO admirable, pero sobre todo y desde mi punto de vista,  nos encontramos ante una metáfora de COMUNICACIÓN INTRAPERSONAL Y COMUNICACIÓN INTERPERSONAL genuinas como base del crecimiento o desarrollo personal.

Mark sufre un desgraciado accidente y se queda totalmente solo consigo mismo en la solemne oscuridad de la noche de Marte. Tras la inconsciencia que le produjo el golpe comienza a despertar sintiéndose herido, abatido, desconcertado en un ambiente que en principio parece hostil. Está perdido y no entiende, no comprende cómo ha podido ocurrirle a él. Ese marco de silencio y de negrura será el lugar obligado desde el que comenzar  una nueva etapa. Un escenario que me recuerda  al un lugar dentro de nosotros mismos que descubrimos forzadamente en las crisis personales. Un espacio interior que algunas personas hemos tenido que visitar para comenzar a hablarnos, escucharnos  y entendernos de manera diferente a como lo veníamos haciendo. Esas pequeñas o grandes <<noches oscuras del alma>> que nos invitan a explorar nuevos territorios personales que no sospechábamos siquiera que pudieran existir.

Así que Mark comienza a explorar entre las herramientas del habitáculo que habían confeccionado e instalado en aquella tierra él mismo  y el resto de sus compañeros; y entre esas herramientas, encuentra utensilios para curar las heridas de su cuerpo.   Después, cuando llega la luz del día, va dándose cuenta de su nueva situación y actúa.

Sí, actúa y lo hace guiado no solo por su gran inteligencia y sus conocimientos de astronauta,  sino, y sobre todo, por su intuición que parece haberse despertado con la caída  y que le guiará en ese proceso de reconstrucción.

Poco a poco en la claridad de los días encuentra más recursos y revolviendo entre ellos se producen hallazgos definitivos: un manual de botánica que le recuerda las claves de la vida y las  heces humanas que serán el  abono que  podrá utilizar para la transformación de una situación caótica en su beneficio. Son descubrimientos que ha de tener muy en cuenta si quiere conseguir más alimento con el que poder subsistir.

Como un mago y siguiendo el proceso necesario consigue frutos en un espacio que parecía yermo. Para ello legará a saber que tiene lo que precisa: tierra, agua, fuego y aire (oxígeno). E incluso desde la creencia limitante de pensar que no tiene esos elementos necesarios, no parará hasta dar con la forma de obtenerlos para conseguir sus objetivos.

En esa primera fase de trabajo en soledad ha comenzado a comunicarse bien consigo mismo, así que la comunicación con la Tierra, con lo otros, no tardará en llegar.

Así que Mark sigue trabajando y en el desarrollo de su acción se suceden fases de genial creatividad que le permitirán confeccionar sistemas cada vez más adecuados y sofisticados para tener una COMUNICACIÓN DE CALIDAD con sus rescatadores.   Tan importante es esta comunicación que si no consigue hacerla bien no logrará la hazaña de salvarse.

A millones de millas de distancia, la NASA y un equipo internacional de científicos trabajan también sin descanso para traer “al marciano” a casa, mientras que, al mismo tiempo, sus compañeros de tripulación trazan una audaz, si no imposible, misión de liberación.

También el humor de Watney  se convierte en un mecanismo de adaptación que le permite evitar la desesperanza y mantener su mente enfocada en la meta,  alejada de preocuparse por las circunstancias externas. Su inclinación por permanecer entusiasmado resulta fundamental en este proceso. Todo lo que le puede salir mal a  Watney, le sale mal y, sin embargo sigue adelante. Tiene una gran equipaje de tesón y de esperanza.

Todos sus colaboradores reflejan como un espejo las propias cualidades de Mark. Él es positivo, asertivo, empático, solidario, generoso, agradecido, disciplinado, constante, comprometido con su equipo;  pero sobre todo, Mark y sus espejos han conseguido tender unos puentes de contacto de altura, así que el feliz final no se hará esperar y llega, como no,  la fusión, el rescate, la victoria…

 

 

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